Crónica y fotos: Sergio García Lavilla
Después de un verano cargado de Festivales de todo tipo por toda la geografía nacional, toca volver a la temporada de Salas, en la que grupos emergentes y consagrados conviven en escenarios más próximos a sus seguidores, pudiendo disfrutar de la proximidad de los fans, sin fosos kilométricos que lo impidan.
En un septiembre, en el que se cierra la temporada de Festivales y empieza la de salas, aterrizan en España los británicos The Psychedelic Furs, un grupo que podemos encuadrar en el post punk nacido a finales de los 70 y que tuvo sus mayores exponentes con Joy Division, The Cure y Siouxie and the Banshees.
El grupo formado por los hermanos Butler allá por el año 1977 tiene 8 discos de estudio, casi todos en su primera etapa, siendo Made of Rain (2020) su último lanzamiento, tras un parón a finales de los 90 retomaron la actividad con una nueva formación de la que solo los hermanos Butler se mantienen.
Después de sus actuaciones en Sevilla, Valencia y Bilbao, en las que todo estaba vendido, tocaba llenar también la Sala But, y vaya si lo hicieron. Con apertura de puertas a las 7, casi una hora y media antes de la actuación, sin teloneros, la fila de unos talluditos fans, se mezclaba con la entrada de las discotecas de tarde. Una mezcla de generaciones, en la que creo que salimos ganando, al haber podido disfrutar de la música de los 80 y primeros 90s, quizás, la mejor de todos los tiempos por variedad y grandes grupos.
Con un ligero retraso, sin un rincón libre, saltan el escenario ante un clamor general, para sin más preámbulo empezar con los primeros acordes de «The Boy That Invented Rock and Roll», un tema de su último disco, confirmando que no estábamos ante un concierto revival, sino ante un grupo que, pese a haber empezado en los 80, son capaces de aportar nuevos temas y mantenerse en plena forma buceando en un sonido más actual.
Con la enérgica «So Run Down» daban al pop noir más íntimo de «The Ghost in You», ante el clamor de los seguidores más incondicionales y los más jóvenes al ser un tema recuperado en la serie Strangers Things. Sin parar de moverse por el escenario, saludando a las primeras filas, con un gran dominio del escenario como muy pocos he visto,
Con un recorrido por toda su discografía, alternando temas de sus primeros Lps como la más rockera, «Only You and I», la calma de «Love my Way», «President Gas», todas ellas del Forever Now (1982) con temas más modernos como Wrong Train de su último trabajo.
Hacia tiempo que no veía un concierto tan solido, con un ritmo tan perfecto, manteniendo el clímax pese a no tener tantos hits en cartera, aunque «Pretty in Pink» y la envolvente «Heaven» nos hicieron recordar a los mejores Furs en una época en la que todo era distinto.
Tras un breve descanso (pre bises) con un público que no quería irse, que estaba disfrutando como hacía muchos años, nos sorprendieron con dos temas adicionales que supieron a poco. El primero, «Pulse», nos llevó a su primer trabajo lanzado en 1980 con el mismo nombre de la banda, con un ritmo muy punk, guitarreo, voz quebrada, ritmo a lo Sex Pistols, para dar paso a «Forever Now» (1982) un tema más luminoso y con una energía desbordante que cerraba una gran noche ante estruendosos aplausos.
Para los asistentes fue un retorno a los 80s (añorados por muchos), de la mano de una banda que no ha perdido el hambre sobre el escenario, con un cantante que mantiene una voz potente, una banda que aguanta el ritmo y empatiza con el público, mezclado todo con una música de muchos quilates, quizás no tan de radio fórmula pero que para por encima a muchos de los grupos que llenan estadios a base de auto tune y melodías enlatadas.
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