Se puede decir que Miss Caffeina ha empezado el año con buen pie. En su primer concierto del 2017, continuando con su gira de presentación de Detroit, se marcaron su primer sold out en La Riviera. Una noche reivindicativa, envolvente y llena de sorpresas. Desde colaboraciones a temas que habían estado sin aparecer en su gira de 2016.
Detroit nos trae a una banda renovada. Unos sonidos con los que experimentaron en “De Polvo y Flores” y que quedan más que asentados en su nuevo álbum. Los sintetizadores dan paso a lo que buscaban: sonar más futuristas y envolventes, sin dejar de lado la importancia vital de las guitarras. Además las letras son un grito al mundo de libertad, buenrrollismo y respeto. Valores que deberían de primar en nuestra sociedad pero que por desgracia no siempre se cumplen. La voz de Alberto Jiménez, por otra parte es algo también a destacar. Tiene un directo muy especial por lo peculiar de su voz y por la capacidad de esta de transmitir al público. También por sus movimientos sobre el escenario. Se da a la música. No baila para exhibirse, se deja llevar como si estuviese en pleno mar y una corriente de acordes y pasión le arrastrara. Hicieron sonar temas como: “Átomos dispersos”, “Mi rutina preferida”, “Gladiador”, “Eres agua”, “Lobos”, “Hielo T”, “Capitán”, “Venimos” y por supuesto “Detroit”. Con este último tema abrieron el concierto tras la intro que lleva sonando toda su gira del 2016. El show fue excelente y hay que destacar la iluminación. Predominaban todo el rato los azules y rosas, colores del nuevo álbum lo cual me pareció muy original y dice mucho de la banda.
Cuidan todo al detalle, especialmente la estética. También aplaudo la humildad y cercanía de la agrupación. Dieron las gracias y echaron la bronca a partes iguales a todos los fans que habían estado haciendo cola desde bien temprano con sus mantan por el frío. Además Alberto Jiménez también tuvo unas preciosas palabras a modo de reflexión antes de un tema. “Deberíamos de elegir líderes que respeten lo diferente (…). Deberíamos ser más comprensivos y ponernos en el lugar del otro. Hoy en día, en un mundo donde (…) muchos jóvenes, incluso niños deciden que no aguantan más y que se van porque son diferentes. Para ellos y para la gente que no entiende que la homosexualidad no sea algo bueno (…) y que cualquier tipo de amor debería de ser lo principal, Oh! Sana”.
Cerrando el concierto, el percusionista de Vetusta Morla, Jorge González interpretó junto a la banda una cover de “Freedom” de George Michael y “Ácido”, acompañados de un estupendo coro. Los chicos de Miss Caffeina se despidieron de nosotros con “Mira como vuelo”, tema con el que revolucionaron por última vez y hasta la próxima al público madrileño.
Texto y fotografías: Ana Cervera Domínguez