Crónica: Víctor Robi
Esta noche nos acercábamos a la mítica sala Gruta 77. La semana anterior, la sala celebró 4800 conciertos durante más de 30 años, y esta vez íbamos a ver nada más y nada menos que a los estadounidenses Bass Drum of Death. Como curiosidad, el líder John Barrett inició el proyecto en solitario, tocando tanto su bombo como su guitarra. A pesar de no gozar de una enorme popularidad, su estilo garage punk se ha colado en series de televisión como Crónicas Vampíricas y en videojuegos de gran envergadura como GTA V o el genial Forza Horizon 4.
Volviendo al tema musical y tras pedir una patanel en la barra (cerveza artesanal de Carabanchel), me dispongo a buscar sitio en una sala abarrotada. Como un huracán, John Barrett y compañía salen a escena con “No Demons” y “Nerve Jamming”. Desde el principio, nos mostraban de qué iba a ir la noche: guitarrazos sin descanso. Aunque apenas interactuaron con el público, no hacía falta más, porque cuando haces buena música y conectas con la gente, ¿para qué es necesario contar un chiste o anécdota? Hemos venido a escuchar música y menear el cuerpo, ¿verdad? Y claramente, estos misisipianos lo consiguieron con un sonido espléndido y directo, que no decaería pero con personalidad para que todos los temas sonaran diferentes.
Y sin esperar a nadie, la actuación avanzó, disfrutando de temas de su último álbum como “Say Your Prayers” o “Everybody’s Gonna Be There”. En apenas unos 40 minutos que pasaron volando, se habría superado la parte inicial, pero por supuesto, hubo un bis donde dejaron algunos de sus temas más conocidos, como “Crawling After You” o “Get Found”. La actuación fue notablemente alta, y dejaron claro que son uno de los grupos más en forma en este género. Poder disfrutarlo en un local donde se respira el rock y el punk en sus paredes es un lujo. La cruz, sin embargo, es la misma de mis anteriores críticas: 50 minutos de concierto me parecen escasos, por mucho que tocaran unos 16 temas aproximadamente. Es una banda con 5 álbumes y con grandes temas como “Everything’s the Same” o “Better Days”, que habrían redondeado aún más la actuación.
Bonus Track: En aproximadamente un mes, hay un evento en Gruta 77 donde se van a juntar bandas muy interesantes de géneros como Garage, Punk o Psychobilly, como los suizos. Se llama Psypunk Surfest, y si sois fan de esos géneros y la cerveza artesanal, tenéis una cita los días 17 y 18 del próximo mes.